En el descanso de las sonrisas
van quedando guardadas
las caricias de las estrellas
a los suspiros de otros silencios,
arcoíris del ayer y del mañana
donde danzan
las miradas al presente
para el gozo de las sombras,
pañuelos de lágrimas
ancladas a las entrañas
de los pasos dados
al atardecer de los sentimientos,
pasajeros en trance del destino,
compasión en expansión
para la comprensión
de los giros de la rueda,
esa que fue dibujada
y olvidada en el origen
para la evolución de las almas
en los ojos de los universos,
donde la existencia
tiende al infinito
cuando la energía
fluye hacia el vacío
creador del tiempo
entre cada
inhalación de la muerte
y exhalación de la vida,
y entre cada
inhalación de la vida
y exhalación de la muerte.
(FE-2021)
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